~LAS PRETENCIONES IMPERIALES DE FERNANDO VII
En noviembre de 1825, la Armada mexicana logró derrotar al último reducto de tropas españolas que se encontraban acantonadas en la fortaleza de San Juan de Ulúa, en Veracruz. Pero la rendición militar no significó la aceptación de la independencia mexicana por parte de la monarquía española.
en el periodo presidencial de Guadalupe Victoria 1824-1829), los políticos mexicanos que firmaban parte de la Logia de York se opusieron a la permanencia de los españoles que residían en México, a quienes consideraban como un peligro latente para la estabilidad del régimen republicano, en vista de las pretensiones del monarca español Fernando VII, de recuperar la soberanía española sobre su antigua colonia.
~LAS CONSPIRACIONES ESPAÑOLAS
A principios de 1827, el gobierno mexicano descubrió la existencia de una conspiración que encabezaba el fraile dieguino Joaquín Arenas, quien pretendía lograr con el apoyo de los residentes españoles en México, derrocar al gobierno establecido y restaurar la soberanía española en México. Arenas fue arrestado y la conspiración fue desarticulada.
~LA EXPEDICIÓN
El monarca español Fernando VII promovió la formación de una expedición de reconquista a esta nación. La expedición militar, organizada en Cuba por el gobernador Francisco Dionisio Vives, se integró con cerca de 4 mil hombres, provistos de municiones y armas suficientes para levantar otro ejército de entre los partidarios de la monarquía española que existieran en México.
Al frente de la expedición se nombró a Isidro Barradas. A principios de julio de 1829, los expedicionarios partieron de Cuba en 40 buques de transporte, además del navío Soberano, las fragatas Lealtad y Restauración, el bergantín Guerrero y la goleta Amalia. Debido a las malas condiciones del tiempo, la expedición se vio obligada a atracar en el puerto de Nueva Orleans, desde donde reemprendió la marcha hacia México, adonde llegaría con tan sólo 3 000 hombres.
~EL DESEMBARCO
El 26 de julio, los expedicionarios desembarcaron en Cabo Rojo, al norte de Veracruz. Desde este lugar, el comandante de las fuerzas expedicionarias emitió una proclama, por medio de la cual invitaba a los soldados mexicanos que habían servido años atrás a la Corona española, a unirse a su causa para restaurar la soberanía de Fernando VII. Tres días después las fuerzas dieron marcha al puerto de Tampico.
En los días siguientes, las fuerzas Barradas se enfrentaron con éxito a las milicias de Tantoyuca y Pueblo Viejo, y se apoderaron de los poblados de Tampico el Alto y Pueblo Viejo, en el norte de Veracruz, así como del Fortín ubicado en la margen derecha del río Pánuco.
~RESPUESTA DE MÉXICO
Al tener conocimiento de la situación, el presidente Vicente Guerrero lanzó una proclama a todos los mexicanos invitándoles a unirse en la defensa de la patria y designó al brigadier Antonio López de Santa Anna para comandar las fuerzas mexicanas.
El 7 de agosto, general Santa Anna se embarcó con cerca de 800 soldados en Veracruz, con rumbo a Tecolutla. Enseuida, se dirigió a Pueblo Viejo, población en la que el 19 de agosto estableció su cuartel general.
Dos días más tarde, con poco más de 400 soldados, Santa Anna emprendió el ataque a Tampico de Tamaulipas, que era defendido por cerca de 600 soldados españoles. Santa Anna aceptó una tregua propuesta por el brigadier Barradas, lo que le permitió reagrupar a sus tropas y regresar a Pueblo Viejo a esperar refuerzos.
~LA OFENSIVA FINAL
Habiendo resivido los refuerzos esperados, el general Santa Anna reanudó las hostilidades el 7 de septiembre, enviando al general Mier y Terán rumbo al poblado de Doña Cecilia, para cortar las comunicaciones entre los españoles que se encontraban en el Fortín y los que se hallaban en Tampico.
ante la inminencia de la ofensiva mexicana y lo diezmadas que se encontraban sus tropas, atacadas por la fiebre amarilla y el vómito negro, el brigadier Barradas pidió parlamento con Santa Anna el 8 de septiembre, ofreciendo capitular, a lo cual Santa Anna se negó, exigiendo en cambio la rendición incondicional. Al día siguiente Barradas insistía en su petición, y Santa Anna volvía a negar el diálogo solicitado.
En la madrugada del 11 de septiembre, Santa Anna arribó con sus tropas al Fortín de la Barra. Los soldados españoles se defendieron con tenacidad y desesperación, frente a los repetidos asaltos a bayoneta de los mexicanos que no lograron apoderarse del parapeto central.
Santa Anna ordenó la retirada ante la imposibilidad de la derrota. Al concluir la batalla, consciente de la imposibilidad de derrotar al ejército mexicano, el brigadier Barradas aceptó la capitulación, firmándose el 11 de septiembre el Convenio de Pueblo Viejo, por el que Barradas se comprometía a no tomar ora vez las armas en contra de México. Los prisioneros españoles fueron remitidos a la Habana, en tanto que Barradas se embarcaba con rumbo a Nueva Orleans.
~CONSECUENCIAS DE LA INVASIÓN
la invasión de Barradas constituyó el último intento de la monarquía española por recuperar su posesión sobre la que fuera la más importante y productiva de sus colonias americanas en el siglo XVIII y principios del XIX. Constituyó también una invaluable lección para los residentes españoles en México, que se convencieron de la imposibilidad de restablecer el régimen virreinal.
Adicionalmente, México se presenta ante otras naciones como un país capaz de mantener su soberanía frente a la amenaza bélica de otra nación.
en que lugar se dio me podrias ayudar ¿?
ResponderEliminaren que lugar se dio me podrias ayudar ¿?
ResponderEliminarmas causa de isidro barradas asia mexico
ResponderEliminarPOR QUE NO LEEIS A UN HISTORIADOR, POLITICO, PERIODISTA MEXICANO QUE SE LLAMA FRANCISCO BULNES Y SABEIS LA VERDAD Y NO LA FARSA QUE ACABO DE LEER??
ResponderEliminarLAS GRANDES MENTIRAS DE NUESTRA HISTORIA
No se ve nada
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